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Evergrande colapsa en su regreso a bolsa

Las acciones del gigante inmobiliario chino Evergrande cayeron fuertemente al regresar el jueves a la Bolsa de Hong Kong tras una suspensión de casi tres semanas, ante informaciones del fracaso de la venta de su unidad de servicios de propiedades.

Evergrande suspendió sus operaciones de bolsa el 4 de octubre en momentos en que enfrentaba una deuda de 300.000 millones de dólares, entre temores de los inversionistas por el impacto que tendría su falta de pago sobre la economía china.

Las acciones de la empresa cayeron 10,5% en la apertura del mercado de Hong Kong y luego pasaron a cotizarse con una baja de 7%.

La caída se dio luego de que la inmobiliaria anunciara el colapso del acuerdo para vender 50,1% de su unidad Evergrande Property Services Group, por un valor de 2.580 millones de dólares, anunció la compañía en un comunicado.

El posible comprador era una unidad de la firma inmobiliaria hongkonesa Hopson Development Holdings.

Evergrande dijo que continuaría tomando medidas para aliviar sus problemas de liquidez, pero advirtió que “no hay garantías de que el grupo pueda cumplir sus obligaciones financieras”.

La empresa con sede en Shenzhen, sur de China, ya incumplió el pago de varios bonos en dólares, y el sábado vence el período de gracia de 30 días de un bono offshore.

Mercado estrecho

El grupo comenzó a cotizar en Hong Kong en 2009, al recaudar 9.000 millones de dólares en su oferta pública inicial, lo que la convirtió en la principal empresa inmobiliaria privada de China y su propietario, Xu Jiayin, en el hombre más rico del país.

Xu expandió sus intereses con la compra del equipo de fútbol Guangzhou en 2010, que pasó a llamarse Guangzhou Evergrande, e invirtió grandes cantidades de dinero en jugadores y entrenadores de primera línea.

Sin embargo, el consorcio comenzó a sufrir con los controles impuestos por Pekín en agosto de 2020 sobre los desarrolladores inmobiliarias para contener su endeudamiento, lo que obligó a Evergrande a vender propiedades a precios fuertemente reducidos.

Los temores de que la empresa podría colapsar por no poder cubrir sus obligaciones estremecieron a la economía china semanas atrás, pese a que Pekín insiste en que cualquier impacto será contenible.

Las dificultades de Evergrande coinciden con una caída, en septiembre, en el precio de las casas nuevas en China, por primera vez en seis años, en momentos que el sector inmobiliario enfrenta crecientes regulaciones del gobierno.

Varios rivales inmobiliarios locales incurrieron en falta de pago de sus deudas en las últimas semanas, y han tenido bajas en sus calificaciones.

Sinic Holdings, que cotiza en Hong Kong, es la última en incurrir en falta de pago, mientras que su competidor Fantasía enfrentó la misma situación en las últimas semanas.

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