
El ataque de Rusia a Ucrania ha hecho que aquellos países que tienen mayor dependencia de las materias primas del país gobernado por Vladimir Putin, hayan caído considerablemente como las principales bolsas europeas.
A diferencia de Europa, Estados Unidos no es un país tan dependiente de las materias primas procedentes de Rusia, como el petróleo o el gas, y eso está provocando que Wall Street se sustente al alza respecto al continente europeo que sí cuenta con un alto porcentaje de importación de recursos rusos. Este hecho está siendo confirmado por expertos como Joaquín Robles, analista de XTB, que en declaraciones ha confirmado que “EEUU se ha visto perjudicado por la subida de las materias primas, especialmente en las energéticas, pero a diferencia de los países europeos no tiene una gran dependencia de Rusia en el suministro”. De hecho, se espera que Wall Street continúe con esta tendencia positiva a futuro a pesar de que EE.UU tiene unas mayores presiones de inflación.
La situación en Ucrania no afecta del mismo modo en Europa que en América. La presidente del BCE, Christine Lagarde, está intentando perseguir la inflación ya que tiene que lidiar con un mercado energético que depende demasiado del exterior mientras que su homólogo en el Sistema de Reserva Federal (FED), Jerome Powell sí tiene en su mano el manejo de los tiempos y puede controlar la inflación haciendo uso de la política monetaria de EE.UU.
Desde que estalló la guerra en Ucrania, las bolsas alemanas y francesas han experimentado un descenso de hasta el 12%. La nota menos negativa en la parte europea le corresponde al Ibex 35, que ha llegado cae hasta el 8%, convirtiéndose en la bolsa europea que menos cae en 2022. El índice Standard & Poor’s 500, que es uno de los índices bursátiles más importantes de Estados Unidos, sustenta su mejor comportamiento básicamente en el sector energético aupado por los precios del petróleo.
De hecho, los problemas que ha generado la guerra en Ucrania no solo está afectando al continente europeo. La bolsa China está sufriendo una importante caída desde el estallido del conflicto. Su presidente, Xi Jinping se ha puesta de perfil con Rusia e incluso podría rescatar a algunas compañías rusas. Los inversores han puesto la cruz a los índices emergentes como consecuencia del castigo a Rusia y el país asiático representa casi un tercio del índice MSCI de Mercados Emergentes, frente a menos del 4% que suponía el país presidido por Vladímir Putin antes del conflicto bélico.
Por si fuera poco, este posicionamiento por parte de China ha provocado que Estados Unidos recrudezca su presión sobre las compañías chinas que cotizan en Wall Street, por lo quecada vez está más encima de la mesa la posibilidad de que el país presidido por Joe Biden plantee su exclusión.