CaixaBank ha anunciado un acuerdo con el fondo TPG para recomprarle el 51% de la gestora inmobiliaria Servihabitat por 176,5 millones de euros. Gracias a esta operación, que devuelve a la entidad financiera el control total de su filial inmobiliaria, CaixaBank quiere disponer de una “mayor flexibilidad y eficiencia en la gestión y comercialización” de sus activos inmobiliarios, “así como una reducción de sus costes”.

La operación, que aún debe obtener el visto bueno de las autoridades de Competencia, tendrá un impacto negativo de unos 15 puntos básicos en la ratio de capital de primer nivel de CaixaBank (CET1 fully loaded) y de unos 200 millones de euros en la cuenta de resultados del banco de este año.

No obstante, la entidad que preside Jordi Gual prevé que en los próximos años el impacto sea positivo, de unos 45 millones de euros anuales.

La entidad financiera traspasó el 51% de Servihabitat a TPG en 2013, en una operación que valoraba la filial inmobiliaria en hasta 370 millones de euros y que reportaba a CaixaBank, que conservó el otro 49%, una plusvalía bruta de 255 millones de euros.

El acuerdo entre CaixaBank y TPG incluía un pacto por el que Servihabitat gestionaría durante una década los activos inmobiliarios de La Caixa. Menos de cinco años después del anuncio de dicho acuerdo, CaixaBank ha decidido recuperar el 100% del capital de su servicer inmobiliario.

El pasado mes de enero, Iheb Nafaa fue nombrado consejero delegado de Servihabitat en sustitución de Julián Cabanillas, que estuvo vinculado a la firma durante dos décadas, los últimos doce años como su máximo responsable ejecutivo. Naffa es ingeniero en Estadística, Economometría y Finanzas por la École Nationale de la Statistique et de l’Administration Économique de París (Francia) y cuenta de una dilatada experiencia como directivo en compañías como BNP Paribas, GE Capital o Gescobro.