El ministro de Finanzas británico, George Osborne, podría reducir los impuestos corporativos a menos de un 15% tratando de compensar el impacto del brexit El ministro de Finanzas británico, George Osborne, podría reducir los impuestos corporativos a menos de un 15% tratando de compensar el impacto en los inversores tras la decisión tomada por el país de salirse de la Unión Europea, de acuerdo a una información publicada por el diario británico Financial Times (FT).
Osborne también fue citado afirmando que necesitan conformar una “economía súper competitiva” con impuestos empresariales lo más bajos posibles y un tratamiento global.
El ministro no señaló una fecha específica para la reducción de impuestos corporativos a menos del 15%. En el comunicado más reciente relacionado con el presupuesto, anunciado en marzo pasado, Osborne señaló que harían una reducción en el gravamen a un 17% para 2020, desde el 20% que se tiene actualmente.
Ese porcentaje es muy competitivo tomando en cuenta el promedio de un 25% en otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y otra reducción podría ocasionar fricciones con algunos gobiernos de la UE que han asomado cierto malestar sobre políticas impositivas competitivas.
Por otra parte, Reuters había informado que la OCDE, en un correo interno, señaló que creía que otra reducción en este tipo de impuestos en el Reino Unido tenía poca probabilidad pero que si se llevaba a cabo transformaría al Reino Unido en “un tipo de economía como la de un paraíso fiscal”.
Otras acciones que conforman el plan de Osborne para que la economía resista del impacto ocasionado por el Brexit incluían fortalecer el respaldo a préstamos bancarios, incrementar los esfuerzos para atraer inversiones hacia el norte de Inglaterra y continuar con la credibilidad fiscal del Reino Unido, de acuerdo a lo señalado por el FT.
El resultado del Brexit puede perjudicar la creciente relación de servicios financieros que posee el Reino Unido con China, que sellaron un conjunto de proyectos como parte de un acuerdo para ampliar los lazos económicos entre ambos países, los cuales estaban apoyados en gran parte por la pertenencia del Reino Unido a la UE.
