El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reconocido la fortaleza de la economía de España y ha elevado sus previsiones de crecimiento para el país.

En su informe anual preliminar sobre España, el FMI ha señalado que “el crecimiento ha sorprendido al alza y se espera un aumento del PIB del 3,1% en 2015 y del 2,5% en 2016, significativamente por encima del promedio de la eurozona”.

El FMI considera que la mejora se debe a las reformas estructurales y a las condiciones favorables externas, incluidas la política expansiva del BCE o la caída del petróleo.

Sin embargo, el organismo considera que todavía persisten vulnerabilidades y problemas estructurales, por lo que ha comentado que “una reversión de las reformas pasadas generaría incertidumbre y podría frenar la recuperación, sobre todo si el entorno exterior se deteriora”.

Helge Berger, jefe de la misión del FMI en España, ha declarado que no puede hacer especulaciones sobre elecciones pasadas o futuras, aunque se ha mostrado optimista sobre posibles avances en materia de empleo al contrastar la preocupación por el primer desequilibrio del país por parte de todos los partidos.

En todo caso, considera que España debe aprovechar la actual bonanza económica para encarar reformas adicionales.

El organismo también ha pedido reducir la deuda de las empresas y familias, continuar con la disciplina fiscal y vigilar las finanzas de las regiones para mantener la confianza de los mercados.

Después de los ajustes de los últimos años, el riesgo de desviaciones en el déficit de las comunidades autónomas no ha desaparecido.

En este sentido, el FMI ha señalado que se debería mejorar el marco fiscal de las autonomías y ha sugerido introducir mecanismos tributarios para ayudar a financiar a las regiones e incluso permitir objetivos de déficit diferenciados para tener en cuenta las diferencias estructurales entre las comunidades.

Por otra parte, el FMI ha recomendado incrementar los impuestos especiales y reducir los tratamientos especiales del IVA para mejorar la recaudación fiscal.

En relación al sector financiero, el FMI ha pedido a las autoridades que animen al sector a elevar sus activos de alta calidad y encontrar formas de reducir los costes derivados de las altas tasas de morosidad.