La Bolsa de Nueva York cerró la sesión a la baja como consecuencia de la suspensión de la cotización del Bancoo Espírito Santo en la bolsa de Lisboa.
El índice Dow Jones perdió un 0,42% y descendió hasta los 16.915 puntos, el selectivo S&P 500 cayó un 0,41% hasta los 1.964 enteros y el tecnológico del mercado Nasdaq cedió un 0,52% hasta las 4.390 unidades.
De esta manera, los inversores acabaron con pérdidas moderadas una jornada en la que llegó a cundir el pánico, cuando a primera hora de la mañana el regulador bursátil portugués suspendió la cotización del Banco Espírito Santo (BES) apenas cuatro horas después de que su principal accionista, el Espírito Santo Financial Group, también dejara de hacerlo.
Teniendo en cuenta que este grupo empresarial tiene numerosas ramificaciones en el sector financiero pero también en sectores como el inmobiliario, el turismo o la agroalimentación, esta noticia desestabilizó la bolsa de Lisboa y arrastró a otros parqués mundiales, sin ser el de Nueva York una excepción, aunque los índices poco a poco fueron recuperándose del susto.
Así, tras precipitarse más allá de las pérdidas del 1%, los operadores de bolsa lucharon durante el resto de la sesión por reconducir el rumbo de las cotizaciones, pero sin poder evitar que los mercados acabaran en números rojos por segundo día consecutivo.
Finalmente, si bien todos los sectores de la economía registraban pérdidas a excepción del de las empresas públicas (0,52%), las caídas fueron más manejables al final del día, destacando las del sector financiero (-0,68%) o el industrial (-0,66%).
En el mercado de divisas, el euro cedía terreno y se cambiaba por 1,3610 dólares.
