La competitividad de la economía española ha escalado seis puestos en el ranking de 2014 del IMD World Competitiveness Center, con lo que se ubica en el puesto 39 de un total de 60 países.

Según el estudio, entre los países analizados son los europeos los que han conseguido un mayor avance en este terreno durante el último año, debido a la incipiente recuperación económica.

Sin embargo, España está todavía en uno de los últimos lugares entre los países europeos de la clasificación. Por detrás de la economía española, se encuentran otros estados europeos como Portugal (puesto 43), Eslovaquia (45), Italia (46), Rumanía (47) y Hungría (48), además de Eslovenia, Bulgaria, Grecia y Croacia, que ocupan los últimos puestos de la clasificación.

La clasificación internacional, según recoge el Instituto de Estudios Económicos (IEE), viene encabezada por Estados Unidos y Suiza, que se mantienen en los dos primeros lugares. A continuación figuran Singapur y Hong Kong, seguidos de Suecia y de Alemania, que avanza hasta el puesto seis. Entre los diez primeros del ranking destaca también Dinamarca, en el puesto nueve.

Luxemburgo, los Países Bajos, Irlanda, Reino Unido y Finlandia, aparte de Malasia, Taiwán y Qatar, figuran entre los veinte primeros países del ranking. Japón se sitúa en el puesto 21, y naciones como Austria, Francia, Bélgica y Estonia aparecen entre los treinta primeros.