La Bolsa de Tokio ha cerrado la sesión del martes en rojo, ante el nerviosismo de los mercados por el conflicto en Siria.
El Nikkei 225 se dejó 93,91 puntos, para acabar en 13.542,37 unidades.
El comienzo de la sesión ya estuvo marcado por las pérdidas: el Nikkei se dejaba un 0,75% tras los primeros minutos de operaciones, y la Primera Sección del Topix un 0,53%.