La mayoría de los seguros de hogar cubren, a través de la garantía de actos vandálicos, los daños ocasionados a la vivienda por personas ajenas a la casa; es decir, personas distintas al tomador del seguro, a sus familiares o a personas que habitan en la vivienda.

Son considerados actos vandálicos aquellos daños que se producen en elementos del hogar asegurado, como consecuencia de actos malintencionados realizados por terceros con la intención de causar daños.

Si nos encontramos con esta situación en nuestro hogar, lo primero que debemos hacer para poder reclamar a los seguros de hogar es poner una denuncia a la policía por los hechos ocurridos. Una vez interpuesta, se debe acudir con ella a la aseguradora para que envíe a sus técnicos y peritos a analizar los daños.

El principal problema que suele ocurrir con estos actos vandálicos es que resulta muy difícil identificar al autor de los hechos y reclamarle los costes ocasionados, por lo que contar con una póliza de seguros de hogar que cubra estos daños es una garantía para no tener que cargar con los gastos ocasionados.

A la hora de contratar una póliza, conviene revisar bien las condiciones para saber qué limitaciones establecen los seguros de hogar en sus indemnizaciones, ya que en muchas ocasiones se excluyen determinadas situaciones vandálicas, como las pintadas, graffitis o pegado de carteles. La mayoría de los seguros de hogar sí que cubren actos multitudinarios o manifestaciones legales, con la excepción de que se trate de un motín o tumulto popular.