Esta semana, los seis grandes bancos que operan en España empezarán la ronda de presentación de sus cuentas de 2016.
Se trata de un ejercicio fiscal complicado, por la obligación de devolver a sus clientes lo cobrado de más por las cláusulas suelo, lo que reducirá su beneficio neto un 10,5%, hasta los 10.093 millones de euros.
Según las estimaciones del consenso de los analistas, las ganancias conjuntas de estas entidades -Santander, BBVA, CaixaBank, Bankia, Popular y Sabadell– sumarán 10.093 millones de euros, frente a los 11.275,8 millones de 2015, un año en el que también tuvieron que dotar cuantiosas provisiones.
Las cuentas globales de 2016 se verán lastradas, además, por las pérdidas de más de 2.500 millones que los analistas calculan que se habrá tenido que apuntar el Popular por la devolución de las cláusulas suelo, entre otros motivos.
Ángel Ron, aún presidente de la entidad, será el encargado de presentar estas cuentas el 3 de febrero, que también expondrá ante los accionistas en la Junta extraordinaria que tendrá lugar el día 20 del mismo mes, en la que se nombrará consejero ejecutivo de la entidad al nuevo presidente, Emilio Saracho, que accederá a su cargo de forma oficial a partir de ese día.
Saracho, procedente del banco de inversión JP Morgan, fue elegido antes de Navidad por el Consejo de la Administración del Popular, a instancias de algunos accionistas descontentos con la gestión de Ron, en uno de los episodios más convulsos de la reciente historia del sector.
De esa forma se cerrará la presentación de resultados de 2016, que iniciará el próximo miércoles 25 de enero el Banco Santander; al día siguiente, el 26 de enero, será Bankinter la que anuncie sus resultados; el 27 de enero será Banco Sabadell el que presentará sus cuentas anuales; a continuación le llegará el turno a Bankia, que se retratará ante el mercado el lunes 30 de enero.
BBVA comunicará al mercado el 1 de febrero unos beneficios de casi 3.500 millones de euros, que serán un 32% superiores a los obtenidos el año anterior, según los cálculos de los analistas del sector.
Al día siguiente, CaixaBank anunciará unas ganancias anuales de unos 1.265 millones, un 55% superiores a las correspondientes al año anterior.
